Las setas y trufas mágicas son dos de los psicodélicos naturales más conocidos, ambos derivados de hongos del género Psilocybe, que contienen el compuesto psicoactivo psilocibina. Sin embargo, aunque ambas producen experiencias psicodélicas similares, existen diferencias entre setas y trufas mágicas en su forma, potencia, legalidad y efectos. Lo que sin duda hace que cada una sea más adecuada para distintos tipos de usuarios y propósitos.
En este artículo veremos las diferencias clave entre las setas y trufas mágicas, analizando desde su propósito biológico y métodos de cultivo, hasta la intensidad de sus efectos y sus cantidades de psilocibina.
En los últimos años, el interés por estas sustancias con psilocibina ha crecido considerablemente debido a sus posibles beneficios terapéuticos y a la exploración de estados de conciencia alterados en entornos seguros. Tanto las setas como las trufas mágicas contienen psilocibina y ofrecen una vía para experimentar estos efectos psicodélicos ancestrales.
Diferentes funciones en la naturaleza
Aunque las setas y las trufas mágicas pertenecen al mismo género de hongos, Psilocybe, y contienen los mismos compuestos psicoactivos, cumplen funciones biológicas distintas en la naturaleza.
Las setas mágicas o alucinógenas son los cuerpos fructíferos de los hongos, diseñados para la reproducción. La estructura de las setas mágicas (compuesta por un tallo y un sombrero) está pensada para liberar esporas al ambiente, asegurando así la propagación del hongo en nuevas áreas y condiciones.
Por otro lado, las trufas mágicas, conocidas técnicamente como esclerocios, cumplen un rol de supervivencia del hongo. Estos esclerocios son masas compactas y duras de micelio (la red subterránea del hongo), que almacenan nutrientes y energía para el organismo en momentos difíciles, como condiciones de sequía o frío extremo.
Este mecanismo permite que el hongo sobreviva bajo tierra hasta que las condiciones sean favorables para crecer nuevamente. Las trufas, al estar protegidas bajo la superficie del suelo, tienen una capacidad mayor de resistir cambios climáticos y condiciones adversas. Las trufas funcionan como un “banco de energía” que el hongo puede utilizar para regenerarse cuando el ambiente lo permita.
Esta diferencia en su función biológica se refleja también en su disponibilidad y facilidad de cultivo. Las trufas suelen ser menos susceptibles a cambios de temperatura y humedad, lo que permite cultivarlas con mayor facilidad y estabilidad. Sin embargo, su crecimiento es más lento.
En cambio, las setas necesitan un ambiente específico de temperatura y humedad. Además de una nutrición óptima en la superficie para prosperar, lo que hace que su cultivo y recolección natural sean más complejos.
Diferencias en el crecimiento, cultivo y recolección
Las setas mágicas y las trufas mágicas también se diferencian en la forma en que crecen y en el proceso necesario para su recolección.
Las setas mágicas son los cuerpos fructíferos del hongo y crecen sobre la superficie del suelo en condiciones cálidas y húmedas. Su crecimiento depende de la disponibilidad de nutrientes en el suelo y de una combinación específica de factores ambientales, como la luz, humedad y la ventilación, para que el hongo fructifique y libere esporas.
Esto hace que el cultivo de setas mágicas sea más complejo que el de las trufas, ya que requieren condiciones de temperatura y humedad controladas para desarrollarse de manera óptima. Pero aún así, el cultivo de un pan de setas alucinógena suele resultar bastante sencillo controlando esos parámetros.
En cambio, las trufas mágicas se forman bajo tierra como masas compactas de micelio. Son más resistentes y pueden crecer en condiciones adversas de sequía o frío, ya que funcionan como un almacenamiento de energía para el hongo en tiempos difíciles.
Al crecer protegidas del entorno, las trufas son menos vulnerables a cambios bruscos en el clima, lo que permite que su cultivo sea más sencillo y menos propenso a fallos. La recolección de trufas es más fácil y predecible en comparación con las setas, ya que se desarrollan en el sustrato bajo tierra y no dependen de un ciclo de fructificación.
Diferencias de potencia y efectos psicodélicos
Aunque tanto las setas como las trufas mágicas contienen psilocibina, el compuesto responsable de sus efectos psicodélicos, existen diferencias en la potencia y en el tipo de experiencia que cada una es capaz de ofrecer.
En general, las setas mágicas son más potentes por peso en comparación con las trufas mágicas, lo que significa que una cantidad pequeña de setas suele producir un efecto más intenso que la misma cantidad de trufas. Esto se debe en parte a que las setas tienen una concentración más alta y variable de psilocibina, mientras que las trufas suelen ser más consistentes y contienen menos cantidad de psilocibina.
Intensidad de los efectos
Los efectos psicodélicos de las setas tienden a ser más profundos y, en algunos casos, pueden incluir alucinaciones visuales intensas, alteraciones en la percepción del tiempo y experiencias emocionales profundas. Debido a esta intensidad, las setas suelen ser preferidas por usuarios con más experiencia o por aquellos que buscan un viaje más introspectivo y espiritual.
En contraste, las trufas mágicas ofrecen una experiencia más suave y manejable, con efectos visuales y sensoriales menos pronunciados, pero aún así muy significativos. Los usuarios suelen describir las experiencias con trufas como menos abrumadoras, con una mayor sensación de control sobre el viaje.
Esto hace que las trufas sean una opción ideal para principiantes o para quienes buscan explorar los efectos de la psilocibina sin sumergirse en una experiencia demasiado intensa.
Duración de los efectos
Ambas sustancias ofrecen un viaje de duración similar, generalmente entre cuatro y seis horas, dependiendo de la dosis y de factores individuales como el metabolismo del usuario. No obstante, debido a la menor potencia de las trufas, su efecto suele ser más gradual y menos abrumador, lo que permite a los usuarios adaptarse mejor a los cambios en su percepción y emociones.
Por el contrario, el efecto de las setas mágicas puede llegar más rápido y ser más intenso, lo cual puede suponer un desafío para quienes no están acostumbrados a estas experiencias psicodélicas.
Diferencias con la dosificación
Comprender la dosis adecuada es esencial para tener una experiencia psicodélica segura y positiva. Dado que las trufas mágicas contienen menos psilocibina que las setas, se necesita una mayor cantidad de trufas para alcanzar efectos similares a los de las setas mágicas. Vamos a ver una sencilla guía general de dosificación para ambas sustancias:
- Microdosis: Una microdosis equivale aproximadamente al 10% de una dosis normal y produce efectos muy leves, que pueden mejorar el ánimo y la creatividad sin provocar experiencias psicodélicas intensas. Para setas alucinógenas secas, la microdosis ronda los 0,1 gramos, mientras que para trufas frescas sería de 1 a 1,5 gramos.
- Dosis media: Es una dosis recomendada para quienes buscan efectos psicodélicos suaves, ideal para principiantes e iniciarse con la psilocibina. En el caso de las setas secas, esta dosis se sitúa en 0,5 gramos, mientras que para las trufas mágicas es de 7 a 8 gramos.
- Dosis normal: Adecuada para quienes desean una experiencia más completa y envolvente. Para las setas secas, una dosis normal es de alrededor de 1 gramo, mientras que para trufas frescas es de 15 gramos.
- Dosis alta: Recomendable únicamente para usuarios experimentados, ya que produce efectos intensos tanto a nivel visual como emocional. En el caso de las setas secas, una dosis alta ronda los 1,5 gramos, mientras que para las trufas frescas se necesitan 20 a 25 gramos para alcanzar una experiencia similar.
Setas mágicas VS trufas mágicas. ¿Qué elegir?
La elección entre setas y trufas mágicas depende en gran medida de la experiencia que cada usuario desea tener, su nivel de experiencia con psicodélicos y las circunstancias del entorno. Ambas sustancias contienen psilocibina y ofrecen efectos psicodélicos similares, pero sus diferencias en potencia e intensidad hacen que cada una sea más adecuada para distintos propósitos.
SETA PSILOCYBE DESHIDRATADA 1G
17.00€PAN DE SETAS GOLDEN TEACHER
31.50€TRUFAS MAGICAS HAWAIIANS 15g
23.11€Para principiantes: Trufas mágicas
Para quienes son nuevos en el mundo de los psicodélicos, las trufas mágicas suelen ser la mejor opción. Con una menor concentración de psilocibina en comparación con las setas, las trufas permiten experimentar efectos psicodélicos de una manera más manejable y gradual.
Esto reduce el riesgo de experiencias abrumadoras y mal rollo, lo que facilita que los principiantes mantengan cierto nivel de control durante el viaje. También conseguiríamos lo mismo con setas mágicas y bajando la dosificación para tener efectos muchos más leves.
Para experiencias potentes: Setas mágicas
Las setas mágicas son la opción preferida para quienes ya tienen experiencia con la psilocibina o desean profundizar en una experiencia más intensa e introspectiva. Su mayor concentración de psilocibina permite alcanzar efectos más potentes con dosis más pequeñas.
Debido a su potencia, las setas alucinógenas pueden llevar a experiencias transformadoras, pero también es importante tener muy en cuenta que el entorno y el estado mental deben ser los adecuados para evitar posibles efectos negativos.
Por lo que tanto las setas como las trufas mágicas ofrecen experiencias de autoconocimiento y expansión de la percepción,. Sin embargo, dadas sus diferencias cada una puede ser más adecuada para cada propósito concreto.
Sea cual sea la elección, el uso responsable y consciente de estos psicodélicos es fundamental para aprovechar sus beneficios y asegurar una experiencia positiva y segura.